Buscador de ofertas

Toda la actualidad sobre esquí y nieve
¿Dónde quieres ir?
Fechas Alojamiento
¿Cuántos sois?
¿Dónde quieres esquiar?
Fechas de alojamiento
¿Cuántos sois?

Dieta y esquí

E
Esqui.com
Dec 29, 2011

Dieta y esquí

 

Una dieta equilibrada y adaptada a cada necesidad, junto con el aporte hídrico y el ejercicio físico es la base de unos buenos hábitos saludables para prevenir muchas enfermedades, entre ellas las derivadas de la obesidad o sobrepeso, hipertensión, enfermedades cardíacas, etc.

 

La práctica de deporte en general es un muy buena aliada a la hora de sentirse bien con uno mismo tanto física como emocionalmente.


En el caso del esquí, con cada vez más aficionados a sus diferentes modalidades, fondo, travesía, alpino, etc., nos encontramos que no tenemos en cuenta normalmente la alimentación, exceptuando a los profesionales del esquí de competición que han comprobado los beneficios de la dieta adaptada a sus necesidades tanto en el entreno como en la competición.

 

El esquí es un deporte completo, de resistencia, que trabaja aeróbicamente grandes grupos musculares, durante un tiempo considerable, dependiendo del nivel y del tipo de esquí que se practique, y en todos los casos un deporte que consume muchas calorías en forma de hidratos, grasas y proteínas, con lo que debemos prepararnos nutricionalmente para su práctica si no queremos desfallecer, bajar el rendimiento, etc.

 

Debemos tener unas reservas de glucógeno muscular antes de salir a esquiar, esto significa llevar una dieta equilibrada y adaptada al tipo de ejercicio, duración, intensidad, condiciones metereológicas, edad, sexo, y un sinfín de datos que la dietista-nutricionista tiene en cuenta para confeccionar la dieta. No nos pueden faltar ni sobrar Kcalorías o energía, vitaminas, minerales, proteínas, lípidos, hidratos, agua, fibra....

 

Con la dieta adaptada conseguimos un rendimiento óptimo y disfrutar plenamente y saludablemente de este tipo de deporte.

 

Unos de los "fallos" más comunes de los esquiadores aficionados, es el de no desayunar o desayunar insuficientemente y además, al querer aprovechar la jornada de esquí, no se hace ningún tentempié ni comida al mediodía, con lo que pueden aparecer síntomas de mareos, "pájaras", cansancio por fatiga y debilidad muscular.

 

La hidratación también es básica, antes, durante y después del ejercicio, cada 20-30 minutos, ya que con la ropa de abrigo y el ejercicio físico se incrementa la sudoración. El frío también hace que miccionemos más al contraerse los vasos sanguíneos.

 

La pérdida de agua no compensada también merma la capacidad para sentirse bien al hacer ejercicio, ya que nuestra composición hídrica corporal es del 80%.

 

Finalmente después de la jornada de esquí también realizaremos una comida con todos los nutrientes que necesita nuestro cuerpo para reponernos y recuperar lo perdido.

 

Es importante realizar una dieta equilibrada adaptada por una dietista-nutricionista en la vida sedentaria y básico en la práctica de cualquier deporte, sobretodo en el esquí, por su desgaste y dureza.

Nuestras mejores ofertas