La segunda prueba en la historia de la Copa del Mundo Audi FIS que se ha celebrado en Andorra ha tenido a la francesa Tessa Worley como vencedora. Ha sido en un Gigante que acaba por poner a Andorra en el mapa internacional del gran Circo Blanco. Worley, que se instala en el liderato de esta disciplina, se impuso tras una primera manga excepcional y una excitante segunda que añadió más emoción al espectáculo. En el podio la acompañaron la eslovena Tina Maze y la alemana Maria Hoefl-Riesch. Todas ellas alabaron la pista Avet considerándola una de las mejores de la Copa del Mundo de Gigante.
Grandvalira-Soldeu, 12 de febrero 2012. – Como el sábado la austriaca Marlies Schild en el Slalom, la francesa Tessa Worley pasará a la añeja historia de la Copa del Mundo Audi FIS como ganadora de una prueba inaugural en Grandvalira-Soldeu, en su caso como la primera en hacerlo en un Gigante. Andorra, convertido en el 25º país que acoge la máxima competición del esquí alpino, volvió a demostrar su capacidad organizativa. Miles de aficionados animaron y vibraron con el espectáculo vivido sobre la pista Avet, reconocida por las participantes como una de las más bellas y técnicas de todo el circuito.
Worley es la única esquiadora que ha conseguido más de un triunfo en los cinco gigantes celebrados durante la temporada, lo que demuestra la extrema competencia existente en esta disciplina, que combina la técnica y la velocidad. Las anteriores ganadoras habían sido, por este orden, la estadounidense Lindsey Vonn (Soelden), la alemana Viktoria Rebensburg (Aspen), la austriaca Anna Fenninger (Lienz) y, justo la pasada semana, en Kranjska Gora, la propia Worley, que de esta manera empalma dos victorias consecutivas.
Nacida el 4 de octubre de 1989 en Annemasse (Francia), Worley tiene 23 años y es hija de un australiano y una francesa. Vivió su infancia a caballo de Nueva Zelanda y los Alpes. Una corredora de baja estatura pero muy fuerte. Su palmarés, corto aún, ya incluye una medalla de bronce (Gigante) en los pasados Mundiales. En cuanto a la Copa del Mundo, ha elevado a 7 sus victorias, para un total de 8 podios.
Olvidada la cancelación del Gigante recuperado de Courchevel que no pudo celebrarse el viernes por culpa del excesivo viento, la pista Avet volvió a ser el escenario de un día soleado y frío (-13º C). La primera manga, trazada por un esloveno y en unas condiciones casi perfectas para esquiar, fue una prueba de fuego para las 63 inscritas. La longitud del recorrido fue de 2.140 metros, con salida en Pla d’Espiolets a 2.240 m y llegada en Soldeu a 1.840 m, tras 400 metros de desnivel. Las esquiadoras afrontaron 50 puertas y 48 giros. Una de las que no consiguió superar el corte fue la única española presente aquí, Carolina Ruiz, quien no tuvo suerte y quedó fuera de las 30 privilegiadas que se jugaron la victoria en el segundo descenso.
Sorpresa: Rebensburg, eliminada
La primera gran sorpresa de la mañana fue la eliminación de la hasta entonces líder de la clasificación, la alemana Viktoria Rebensburg, quien asumió desconsolada su error: “Tracé mal arriba y no pude negociar una puerta a derechas”, confesó en meta. Con ella KO, se abrió el abanico de favoritas, entre las que ya destacó Worley. Vencedora en Kranjska-Gora la pasada semana, la gala marcó el mejor tiempo (1m10s37), seguida muy de cerca por la italiana Manuela Moelgg (a 13 centésimas), la alemana Maria Hoefl-Riesch (a 37), la eslovena Tina Maze (a 42) y la austriaca Elisabeth Goergl (a 62).
En cuanto a Lindsey Vonn, tres veces campeona de la general de la Copa del Mundo y actual líder tanto en ésta como en la clasificación específica de Descenso y Súper-G, aspiraba a resarcirse de su caída del sábado en el Slalom. Tercera en la clasificación mundialista del Gigante pese a no ser su prueba preferida, la mediática estadounidense tuvo que abrir pista y eso pudo penalizar su crono en la primera manga. Tras ella, casi todas las optantes al podio fueron pasando por debajo de su 1m11s76, lo que la obligaba a una segunda bajada magistral si pretendía hacer medalla. La campeona olímpica en título también tenía un objetivo: su décima victoria en lo que llevamos de temporada. Sin embargo, esta segunda manga se vio alterada por el viento en la zona más alta del trazado, hasta el punto de que el jurado de carrera decidió recortar el punto de partida: se salió desde la cota de 2.140 m y el desnivel fue de 300. En lugar de 50 fueron 39 las puertas a negociar.
Esta segunda manga tuvo emoción hasta el final, ya que la austriaca Anna Fenninger marcaba el mejor tiempo (50s97 para un total de 2m2s94) y se colocaba líder provisional. Luego, sucesivamente, su compatriota Elisabeth Goergl (51s81 para 2m2s80), la eslovena Tina Maze (51s17 para 2m1s96) y la alemana Maria Hoefl-Riesch (51s81 para 2m2s55) se colocaban en el podio, con Maze líder a la espera de la bajada de Worley. La francesa, lejos de ser conservadora, se lanzó a tumba abierta y, aunque no fue la más rápida en esta segunda bajada (51s43), acabó logrando el mejor tiempo total con 2m1s80. Para ella sonaron los acordes de ‘La Marsella’, y para Andorra, los de la confirmación de que en el futuro podrá organizar más pruebas de la Copa del Mundo sobre una pista Avet que ha entrado por derecho propio en el Gotha de las mejores pistas del planeta.
Declaraciones del podio
Tessa Worley (Francia): “Ha sido una jornada perfecta: dos bajadas magníficas y el triunfo. ¡No puedo pedir más! Para mí ha sido mejor que la segunda manga se recortase, porque el viento podría haberme perjudicado. Me marcho muy contenta de Andorra. La pista me ha gustado mucho, tanto o más que la pasión que ha mostrado el público”.
Tina Maze (Eslovenia): “Hubiese querido ganar, pero Tessa (Worley) lo hizo muy bien. Estoy contenta, pese a todo. ¿Ganar la general de la Copa del Mundo? Son 400 puntos los que me lleva Lindsey (Vonn) así que no pienso que ella sienta presión. Voy a seguir intentándolo. Me ha encantado competir aquí: una gran pista, gente fantástica, gran ambiente. Espero que la Copa del Mundo siga visitando a Andorra en el futuro”.
Maria Hoefl-Riesch (Alemania): “La pista Avet es una de las mejores que hay en la Copa del Mundo, difícil y exigente. Con este podio me siento contenta, aunque no es mucho para pillar a Lindsey (Vonn) en la general de la Copa del Mundo. No es mi objetivo ahora, sino ganar pruebas. Grandvalira-Soldeu ha sido fantástico en todo. Felicidades a Andorra, porque lo ha hecho muy bien”
