Debes introducir un correo electrónico que sea correcto y aceptar la política de privacidad
Ha ocurrido un error. Vuelve a intentarlo y si el problema continua puedes escribirnos en info@esqui.com
Te has suscrito correctamente
Estado de pistas y meteorología
Ofertas
Hoteles por zonas
Estado de pistas por zonas
Ofertas de esquí por zonas
Ofertas por fecha
Hoteles por estaciones
Hoteles por estaciones
Hoteles por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Estado de pistas por estaciones
Ofertas por estaciones
Ofertas por estaciones
Ofertas por estaciones
Ofertas por estaciones
Adiós a las chaquetas abultadas, bastas y antiestéticas para protegernos del frío y practicar el esquí. La vestimenta que se ve ahora en las estaciones nada tiene que ver con las de los años 30... aunque es cierto que las competiciones de los deportes de nieve siempre han tenido una sensibilidad especial en la apariencia. Hoy ya entran en las pistas, sin pudor ni complejos, grandes marcas de la moda como Inditex o H&M. Cuidado al descender, que no te entretenga la pasarela de Milán.
Antes se esquiaba con lana, algo impensable a día de hoy, con tanto Thinsulate, Gore, Softshell, multicapas, tejidos transpirables y Windstoppers como hay en el mercado. Poco a poco el material más recomendado por las abuelas de todo el mundo para protegerse contra el frío (la lana) se ha ido sustituyendo por otros con unas características técnicas más adecuadas para la nieve, con antideslizantes exteriores y gran capacidad de impermeabilidad.
Llegaron los monos y las teorías de que unos permitían acortar algunos segundos en el descenso. Mítica fue la victoria de Karl Schranz en Wengen en 1966 con un mono negro y brillante, que le valió el apodo de llevar 'el traje de James Bond'. Confesó haber pasado vergüenza y que se lo puso porque le prometieron avanzar tres o cuatro segundos más rápido que sus rivales; ganó, pero nunca admitió que fuera gracias al estrafalario traje.
¿Y ahora qué? Ya no vemos solo Descente, Millet, Tsunami o North Face. Esta temporada el gigante gallego de la moda Inditex (Zara) ha lanzado un catálogo de moda para la nieve a través de su marca Oysho. Se trata de una línea de esquí femenina que incluye toda la ropa y accesorios necesarios (chaquetas, pantalones, leggins, camisetas, gorros...). No es la primera. Otras marcas tradicionalmente de moda no deportiva como H&M igualmente se ha lanzado a vestir a los amantes del esquí, para generar una nueva necesidad: comodidad, confortabilidad, impermeabilidad, funcionalidad, calidez... y ahora también diseño y estar a la moda.
Al margen de la moda: las claves de la ropa de esquí
La democratización del esquí ha hecho que de la misma manera las prendas se hayan ido acercando a todos los bolsillos. Unos se alegrarán de poder elegir un diseño, de marcar tendencia; otros se lamentarán de no poder escapar de la moda ni en la montaña. En cualquier caso, es importante que prioricemos otros aspectos. Como explicó recientemente el director de la Escuela Europea de Esquí de Sierra Nevada a agencias de comunicación, lo ideal es abrigarse "por capas". Eso significa que es mejor ponerse muchas capas finas, que no pocas y muy gruesas. Recuerda que lo más importante en el esquí -y en el deporte de montaña en general- es no sudar, ya que las prendas mojadas pierden toda su capacidad de aislamiento.
De la misma manera, hay que llevar siempre crema solar, gafas de sol y usar casco. Las mejoras de los materiales y el ansia por alcanzar cada vez más velocidad en los descensos hace cada vez más imprescindible el uso de la protección en la cabeza (aunque de momento, solo es obligatorio en niños y recomendable en adultos). Igualmente es importante llevar siempre un solo par de calcetines y de buena calidad, rehuyendo de la clásica 'chapuza' de ponerse dos o tres pares para evitar el frío: con eso lo que conseguimos es perder sensibilidad y oprimir la circulación sanguínea. Por último, el experto de Sierra Nevada aconseja el uso de mallas térmicas para expulsar el sudor y evitar que se quede el frío en el cuerpo. Destaca que es preferible que lleguen a la altura del gemelo para evitar pliegues con el calcetín.
