Las estaciones de esquí españolas confían en la Semana Santa para “maquillar” los resultados de la temporada 2020-21. Todas las pistas que están abiertas creen que irán a más a medida que mejoren los datos epidemiológicos y se suavicen las restricciones de movilidad, algo que ha empezado ya a suceder en comunidades como Andalucía o Catalunya.
El objetivo es tener una Semana Santa -entre el 28 de marzo y el 4 de abril- como mínimo igual a las Navidades en el Pirineo de Lleida, Sierra Nevada o Madrid y mucho mejor en el Pirineo de Girona, que durante las fiestas de fin de año y hasta Reyes estuvo confinado perimetralmente-.
Hoy en día, si las condiciones de nieve acompañan, todas las estaciones tienen previsto estar abiertas hasta la Semana Santa. A partir de entonces, la mayoría cerrarán, pero unas pocas se mantendrán en funcionamiento hasta que aguante la nieve.
Los números rojos en las cuentas marcarán esta temporada que quiere prolongarse más allá de Semana Santa
Por mucho que se consiga alargar la temporada, sin embargo, todas las estaciones con alguna excepción terminarán en números rojos una temporada en la que el adjetivo “desastrosa” está en la mente de todo el mundo, pero nadie dice en voz alta y califican de “extraña”, “excepcional” o “con pérdidas”.
Es el caso de Port del Comte, que ha conseguido mantenerse en funcionamiento desde el Puente de Diciembre y hasta la fecha. Su director, Albert Estella, explica que en las pistas del Solsonés la afluencia de esquiadores en febrero es de unas 800 personas entre semana y entre 4.000 y 5.000 en fin de semana, “mientras que este sábado vendimos 70 forfaits por 35 el domingo”.
Estella recuerda que en Port del Comte la Semana Santa “depende mucho del calor, que derrite la nieve rápidamente”, pero espera poder llegar hasta finales de marzo. “Será una temporada de pérdidas, lo que condicionará las inversiones del futuro”, indica.
El director de la estación leridana, de propiedad privada, se pregunta qué hubiera sucedido si en lugar de estar ubicados en el Solsonés estuvieran dentro de un municipio como Barcelona; “Ahora estaríamos hablando de unas cifras de esquiadores muy aceptables, en lugar de las 10 o 15 esquiadores del pueblo de La Coma”.
Su responsable de marketing y comunicación, Oscar Vallejo, recuerda que “por desgracia sabemos que el Sistema Central tiene unas condiciones muy variables, pero esperamos que con la base que tenemos -hasta 80 cm- podamos llegar a Semana Santa. Con los aforos máximos que marca la normativa Covid, hemos llenado todos los días en los que hemos estado abiertos y nos ha ayudado el hecho de que los esquiadores madrileños no pudieran salir a otras zonas de esquí”.
También prevé esquiar hasta mayo uno de los grandes de España, Sierra Nevada. La estación de Granada se ha mantenido abierta contra viento y marea desde mediados de diciembre y no va a desfallecer hasta principios de mayo.
Santiago Sevilla. Jefe de Comunicación en Cetursa Sierra Nevada S.A., señala que “hemos demostrado que en situación de pandemia y restricciones asociadas hemos sabido adaptarnos. Tenemos la sensación de que la gente tiene ganas de esquiar y a poco que haya nieve y movilidad el usuario responde”.
La estación de Monachil va a seguir adaptando la apertura de nuevos remontes y pistas a la respuesta del público hasta la primavera. Según Sevilla, “vivimos la temporada más rara de nuestra historia, pero no sólo el sector de la nieve y vamos a ir día a día en función de las posibilidades que tengamos. En estos momentos 20 km esquiables y a partir del próximo jueves esperemos que podamos ampliar el dominio”.
Otra de las estaciones con fama de ser de las primeras en abrir y de las últimas en cerrar es Masella, en el Pirineo de Girona, donde están convencidos que si las restricciones se relajan a partir del 21 de febrero los esquiadores van a volver a subir a las pistas de la Cerdanya.
En opinión de Maite Martí, responsable de marketing y relaciones públicas, “aún queda bastante temporada y la Semana Santa nos puede servir, al menos, para cubrir gastos de explotación. A pesar de que la movilidad sea mínima -ahora comarcal- mantenemos abierto todo el desnivel esquiable y estamos preparados para abrir más sectores si llegan más esquiadores”.
También están preparados para abrir más sectores de la estación en Baqueira Beret, donde se darían por satisfechos con una Semana Santa pareja a las Navidades. Su director comercial, Xavier Ubeira, es claro: “los esquiadores quieren subir y tenemos muchas reservas. Nuestro compromiso es estar abiertos e ir abriendo pistas y remontes, como Beret, a medida que se suavicen las restricciones”.
Ubeira explica que la Semana Santa “permitirá maquillar la temporada y dar servicio a nuestro cliente de temporada, que se merece esquiar lo más que pueda” y se felicita de que la temporada 2019-20 -a pesar de cerrar antes- fuera exitosa “porque si viniéramos de un mal año sería imposible”.
Lo que sí tiene claro Baqueira Beret es que seguirá abierta si puede hasta el 5 de abril, pero no más allá, lo mismo que el gran grupo de estaciones de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) -La Molina, Vallter 2000, Vall de Nuria, Boí Taüll, Port Ainé y Espot-.
El presidente de FGC, Ricard Font, nos contaba hoy que “la mejora de los datos de la pandemia hace pensar que podemos tener una Semana Santa como las Navidades -pero con la Cerdanya y Ripollès abiertas-. Si es así será un buen final de temporada".
Font no considera abrir después de Semana Santa “no tiene sentido seguir abiertos si la gente no sube a esquiar”.
De hecho, las estaciones públicas de FGC ya habrán cumplido con su cometido de “mantener la actividad económica de las comarcas de montaña”.
El máximo responsable de las estaciones del grupo avanza que tras una temporada con pérdidas como la actual no habrá inversiones en instalaciones y que el futuro inmediato se centra en mejorar los procesos de digitalización y los sistemas de innovación para ser más eficientes y sostenibles con el medio ambiente.
Ricard Font considera que aún es pronto para hacer balance y que para evitar pérdidas la solución era no abrir, “pero decidimos abrir todas las estaciones del país juntas pensando en el territorio y vamos a cerrar todas juntas”.
Fuente: lugaresdenieve.com
