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Cómo aprender a esquiar: consejos y técnicas

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Esqui.com

Cómo aprender a esquiar: consejos y técnicas

Por algo el esquí es un deporte que gana adeptos temporada tras temporada: solo dura un tiempo determinado, por lo que puedes compaginarlo con otros que también te gusten y no te saturarás; es perfecto para practicarlo con amigos; te permite conocer rincones en unas condiciones nevadas que, de otra manera, sería muy difícil.

Así que, al fin te has decidido: quieres aprender a esquiar. Ya está bien de ver fotos de los demás de preciosas montañas nevadas y disfrutando a tope de la adrenalina de descender por sus blancas laderas. No te pierdas esta completa guía con consejos y técnicas donde descubrirás cómo aprender a esquiar.

 

Unos consejos previos para esquiar

Antes de pasar a la acción, vamos a darte algunos consejos previos que debes saber sobre el esquí. En primer lugar, se trata de un deporte físicamente exigente, por lo que hay que llegar en forma a la estación de esquí: eso no significa que tienes que haber corrido un maratón antes de ir, pero sí que hagas algo de deporte y, sobre todo, que calientes y hagas estiramientos antes de iniciar la jornada de esquí para reducir el riesgo de lesiones.

En segundo lugar, debes consultar el estado de las pistas de esquí o el parte de nieve de la estación donde tienes previsto ir. Se puede ver por internet, en la web de las estaciones, aunque los hoteles también suelen tenerlo a primera hora de la mañana. Al ser principiante, fíjate en las pistas verdes y azules: su estado y cuántas están abiertas.

En tercer lugar, a esquiar hay que ir bien equipado. Eso significa: con unas botas bien sujetas (ni muy flojas, ni muy apretadas, ¡que no te corten la circulación!), usar casco (aunque no sea obligatorio en la mayoría de las estaciones, es una gran garantía de seguridad), unas gafas correctas, crema solar (el sol pica, ¡y mucho!, en alta montaña), vestimenta por capas para ir quitándotelas y evitar la sudoración…

En cuarto lugar, los principiantes deben ir a su ritmo y esquiar por pistas donde se sientan cómodos. No intentes seguir a tus amigos que tienen más nivel que tú, tirándote por pistas azules, rojas o negras cuando todavía no sabes ni girar correctamente. Tampoco tienes que aguantar lo mismo que ellos ni esquiar non-stop hasta que cierren las pistas: tómate todos los descansos que necesites, y es que la fatiga favorece la aparición de lesiones. Ya sabes: “más vale una retirada a tiempo”.

Por último, si no sabes esquiar, lo ideal es recibir clases. Todas las estaciones de esquí cuentan con monitores profesionales que te ayudarán en tus primeros pasos. Con sus lecciones, evitarás adoptar “vicios” o posturas incorrectas desde el principio.

 

Las técnicas básicas para aprender a esquiar (con vídeos)

-La posición correcta para esquiar. Empezamos con lo básico: cuando estás sobre los esquís, debes colocarte con las rodillas algo flexionadas y con el cuerpo un poco inclinado hacia adelante, con los esquís algo separados, hacia la altura de las caderas. La cabeza tiene que mirar hacia el frente. Evita malos hábitos de principiante como hacer como que estás sentado en una silla imaginaria o mirar hacia los esquís.

-Para mantenerte en pie en una pendiente sobre los esquís, cuando estés parado, debes mantener un ángulo correcto del cuerpo y un canteo adecuado de los esquís. Esto último consiste en clavar sus cantos en la nieve para hacer de freno, lo que se logra poniéndolos en posición perpendicular a la inclinación de la pendiente.

-Hacer la cuña. Se trata de la primera técnica que debes aprender, ya que es la que permite controlar la velocidad de la bajada, frenar y girar sobre los esquís. Básicamente consiste con colocar los esquís dibujando una “V”, de manera que sus partes delanteras se juntan y las traseras quedan separadas. Aquí te dejamos dos vídeos para profundizar en la importante técnica de la cuña:


 


 

-La inclinación. Se refiere a la inclinación a la que colocamos el cuerpo cuando vamos a girar. En los virajes agresivos nos inclinamos de manera que prácticamente rozamos la nieve con la mano del lado por donde giramos. Pero tranquilo, que todavía estamos en los inicios, así que empezamos probando virajes abiertos y con poca velocidad: en estos casos, el cuerpo lo mantendremos casi vertical.

 


 

-El ángulo. Se trata de la curvatura lateral que hay que hacer con el cuerpo para ajustar la inclinación, como si fuera una “coma”. Con ello se puede regular el principio y el final del giro. Aquí te dejamos vídeos con ejemplos de ángulos abiertos y ángulos cerrados:

 

 


 

-Las diagonales. Cuando nos encontramos con una pendiente amplia y pronunciada, hacer diagonales correctamente nos permite controlar adecuadamente la velocidad, descenderla sin problemas y con más seguridad. Esto, sumado al giro básico, te dará unas técnicas interesantes para ganar confianza en largas pendientes. Las diagonales se hacen formando un ángulo con la línea de la pendiente y con los dos esquís en paralelo, de manera que el inferior roza la nieve y el superior ayudar a mantener el equilibrio. Con el ejercicio de la “Guirnalda” que te mostramos a continuación puedes practicar.

 


 

Aquí te hemos dejado algunas técnicas básicas para comenzar a iniciarte en el apasionante mundo del esquí. No obstante, seguimos recomendando asistir a alguno de los múltiples cursos que ofrecen las escuelas de esquí de las estaciones: cuentan con profesionales titulados y especializados en diferentes grupos de edad, condiciones o nivel (niños, mayores, personas con discapacidad, novatos y esquiadores avanzados, etc.), que se adaptan a tus necesidades.

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