Todo montañero que se precie sabe que el pico más alto de los Pirineos es el Aneto, el segundo más elevado de la Península Ibérica solo por detrás del Mulhacén de Sierra Nevada. Ahora bien: ¿Qué otras grandes cimas conoces de la cordillera que separa España y Francia? ¿Sabrías decir qué cumbres son las más altas de los Pirineos?
Por curiosidad, por cultura general, porque eres un friki del alpinismo o porque estás buscando nuevos retos de altura, te interesará conocer la lista de los 10 picos más altos de los Pirineos con propuestas de rutas para coronarlos. Te avisamos de que hay varios que no son muy conocidos y están en las proximidades del emblemático Aneto.
La montaña más alta de los Pirineos está en el parque natural Posets-Maladeta, en el municipio de Benasque. Uno de sus puntos más emblemáticos es el llamado “Paso de Mahoma”, un estrecho acceso de la antecima a la cima, con verticales a ambos lados, que en época estival suele haber bastantes aglomeraciones porque solo se puede avanzar de uno en uno. No es complicado, pero el riesgo es alto porque está muy expuesto (es especialmente delicado en invierno).
La ruta de ascenso más tradicional es la que parte del aparcamiento de La Besura, a 1.900 metros. En verano, solo se puede llegar aquí en autobús. Desde este punto, se pasa por el Refugio de La Renclusa, donde muchos hacen noche, y se prosigue por la Crencha d’els Portillons, pasando cerca del Portillón Inferior y cruzando por el Portillón Superior entre bloques y pedreras. En la otra vertiente, se baja al glaciar del Aneto, que se va remontando hasta la Collada Corones y el Puente de Mahoma. Es necesario piolet, crampones y cuerda todo el año.
Podemos decir que es uno de los “tresmiles” más asequibles del Pirineo, teniendo en cuenta que estamos en alta montaña con todo lo que eso conlleva. Su cima es un espectacular mirador de los valles de Estós, Eriste y Chistau. Desde lejos, su silueta es fácil de identificar por su forma trapezoidal.
La ruta más habitual para subir el Posets es por el valle de Eriste y la canal Fonda (también conocida como la “Ruta Real”), que es la más corta. Podemos hacer una pausa en el refugio Ángel Orús para que la ascensión no sea tan dura (son casi 2.000 metros de desnivel positivo).
En el corazón de los Pirineos está uno de los picos más emblemáticos de la cordillera y que da nombre al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. El punto más conocido y temido de su ascensión es la llamada “Escupidera”: es un último tramo de gran pendiente y que acaba en un cortado. En invierno, suele ser imprescindible el uso de crampones y piolet; en verano, hay que ir igualmente con mucho cuidado porque pueden rodar piedras de considerable tamaño por el movimiento de montañeros que tengamos por encima.
La ruta más habitual para coronar el Monte Perdido parte de la Pradera de Ordesa. Sigue hasta la famosa Cola de Caballo, donde seguiremos ascendiendo por las “zetas” o por las Clavijas de Soaso hasta el refugio de Góriz. De ahí se va hasta el lago helado, la Escupidera y la cima.
Un pico poco conocido de los Pirineos que está en el macizo de la Maladeta. Podemos subir desde la Renclusa, por la ladera norte (siguiendo en buena parte el recorrido del Aneto), o desde Vallibierna, por la ladera sur, desde el Plan de Senarta, pasando por crestas dentadas y brechas. Por ambas partes se tardan unas 4 horas de subida (a lo que habría que sumar el tiempo de descenso).
Muy cerca de la Punta d’Astorg está el Pico Maldito, también en el parque natural Posets-Maladeta, en el municipio de Benasque. No es una montaña muy frecuentada, especialmente si la comparamos con otras de la zona como el Aneto, así que es ideal para los que buscan ese sentimiento de exploradores de lo inhóspito que lanzó al ser humano a descubrir los techos del mundo.
Una vía de ascenso cómoda es desde el Refugio de la Renclusa, desde donde tendremos unos 5,3 kilómetros de subida y casi 1.300 metros de desnivel positivo. Vale la pena hacer noche en el refugio porque la ruta es larga.
Otro pico que, pese a su elevada altura, es secundario, de manera que no suele haber mucha gente atraída por su cima. Forma parte de la cresta de Llosás, a la que podemos llegar por el Corredor Estasen, con una pendiente máxima alrededor de los 45 grados, o desde la cima del Aneto, descendiendo hacia la arista de Llosás. Un buen complemento a la ascensión del pico más alto de los Pirineos. ¡Por si se te queda corto!
Seguimos en el mismo punto que antes, en los alrededores del Aneto. Aquí está la llamada Espalda de Aneto (también conocida como Cap de los 5 Hermanos Cadier), que es un nudo de aristas que culminan en los 3.350 metros de altitud.
Se puede llegar desde el Aneto, bajando por el lado opuesto al Paso de Mahoma, o por el Plan d’Aigualluts, sin pasar por ninguna otra cumbre previa, pasando por la colladeta de Barrancs, el Glaciar de Barrancs y subir a la cresta de La Espalda, con algunas trepadas. Desde aquí podemos pasar al pico Aneto siguiendo por el lomo.
Ya hemos visto, en el parque natural Posets-Maladeta, el pico Maldito y la Punta d’Astorg. Pues bien, si seguimos ese cordal de montañas alcanzaremos el Pico del Medio o Tuca d’el Mich, otro promontorio que figura en la lista de los 10 picos más altos de los Pirineos con sus 3.346 metros.
Se sube desde el Refugio de la Renclusa por el Portillón Superior y el Collado del Medio. Tiene una trepada final que es sencilla en verano y es algo más delicada cuando hay nieve.
Realmente es la antecima del Pico Maldito. Su peculiar nombre viene de los alemanes Hans Schmidt y Kurt Endell, que en verano de 1908 recorrieron toda la cresta del Pico Maldito-Pico del Medio, pasando por el collado Maldito y el collado de Coronas.
Se puede ascender a este pico de los Pirineos siguiendo el camino del Collado Maldito, desde La Besurta y Portillón Superior, o bien desde Ballibierna, hacia el ibón Medio de Coronas y subiendo por la muralla de la cresta de Cregüeña.
Acabamos la lista de los 10 picos más altos de los Pirineos con una de las montañas que flanquean el pico Posets: Las Espadas. No es una cima muy conocida pese a que tiene entidad propia porque todas las vías de ascenso plantean alguna dificultad, así que no está hecha para el “público general montañero”.
Si crees que estáis preparados, debéis saber que se puede subir desde el refugio de Viadós y desde el refugio del Forcau y refugio de Ángel Orús.
